martes, 11 de septiembre de 2007

en lo oscuro






Y dibujo esas formas a veces siniestras, esas que permanecen enterradas en lo más hondo de mi alma, con la esperanza de recuperar tu rostro. Han germinado mil estaciones. Pero jamás una primavera. Hace calor, y quiero quitarme los prejuicios que me abaten y no me dejan ser la mujer salvaje, que puja por salir al mundo.



Y sonrío cuando alguien me dice buenos días, y me guardo los secretos que son el nudo y la razón de esa vulgaridad escondida.



Y en la noche, hay un lobo aullando en mis sueños... arañando las paredes de mi cabeza, buscando explorar el mundo externo. Y lo encierro en las pesadillas, y sé que un día va a escapar...



Tengo miedo de unirme a su bestialidad, en convertirme en una vampirezo, de derramar sangre propia y ajena, recobrar venganza por aquellos corazones destrozados...

Y llegará ese día, y me temerás. Y sabrás que lo peor que pudiste hacer es herir a una mujer...